Hasta ahora el arte ha sido objeto de muchos cambios a través de diversos estilos que han surgido con la intención de criticar y presentar una visión alternativa de la concepción sobre el arte. Para finales del siglo XIX surgió un movimiento llamado impresionismo cuya intención fue provocar una ruptura con el arte de academia y transformar el lenguaje artístico. Este movitiento, a su vez, dio inicio al trayecto para los movimientos vanguardistas.
El impresionismo apela a la percepción o a la manera de ver las cosas, puesto que su finalidad en el espectador es provocar un efecto visual. Para este propósito, se valió de pinceladas sueltas, tonos claros y luminosos, dándole un valor inigualable a la luz en los lienzos. La naturaleza fue su inspiración por lo que se pintaron paisajes y escenas cotidianas. Sin embargo, también abrieron puertas a explorar una gama temática que iba desde vistas urbanas y nocturnas, interiores con luz artificial, escenas de cabaret y circo, personajes de la bohemia hasta personajes marginados y mendigos.
Entre sus exponentes principales destacaron: Edouard Manet, Claude Monet, Camille Pissarro, Alfred Sisley, Pierre Auguste Renoir y Edgar Degas, los cuales en sus obras demostraron las características de este movimiento. Manet en su obra Olympia de 1863 muestra a una cocotle (mujer que vende sus favores a una clientela adinerada) en espacio cerrado, pero iluminado. Mientras, Monet en El desayuno de 1865-66 se ve a un grupo de personas llevando a cabo una actividad cotidiana enmarcada por un paisaje. Por otra parte, Pissarro en Bulevar Montmartre, primavera de 1897 pinta una vista urbana de una zona concurrida por transeúntes. Por otra parte, Sisley en la Regata en Hampton Court de 1874 representa un paisaje marino y personas disfrutando del mismo como parte de lo cotidiano. Renoir, en La primera salida de 1876-77 muestra una escena de la vida diaria de personas adineradas. Degas también presenta una actividad cotidiana, pero privada como lo es bañarse con su obra Mujer en la bañera de 1886.
En la escultura se presenciaron cambios conducidos por Auguste Rodin quién se encargó de establecer las bases de la escultura del siglo XX. La pieza El pensador de 1880-1900 es una clara muestra de su trabajo particular. Otro cambio que experimentó lo fue la desintegración de su forma iniciado por Medardo Rosso, autor de Bambino Malato o Niño enfermo de 1858 en la que representa la impresión de un convaleciente a la vez que se aprecia que como cambia la forma y técnico en busca de la verdad más allá de la apariencia. El artista fue considerado el precursor de muchos aspectos de la escultura moderna en cuanto a conceptos, formas y técnicas aplicables.
No obstante, al tiempo que fue evolucionando el impresionismo abrió paso al neoimpresionismo cuyo enfoque fueron los fenómenos ópticos. De ahí que hayan desarrollado la técnica del puntillismo. La misma consistió en realizar la composición mediante el empleo de puntos de colores puros que eran colocados junto a colores complementarios, combinándose en la retina del espectador en un tono nuevo. George Seurat y Paul Signac fueron los principales exponentes. Seurat en su obra La Sena y la Grande Jatte en primavera de 1888 muestra con firmeza esta técnica al igual que Signac en El puerto de Marsella de 1907. El divisionismo surgido en Italia fue otra técnica caracterizada por la cercanía de colores descompuestos y largas pinceladas que producían una sensación de composición. Entre los practicantes destacan Giovanni Segantini con su obra Vanitas y Gaetano Previati con Maternidad. En ambas obras es notable la genialidad particular al momento de trabajar el lienzo aplicando la técnica.
Por otra parte, un grupo de artistas reinterpretaron los hallazgos de los impresionistas en cuanto a técnicas de manera personal y abrieron vías de desarrollo nuevas que permitieron la evolución del arte del siglo XX. El postimpresionismo agrupó una serie de artistas como HenrinToulouse-Lautrec quién representó escenas de circo y cabaret. En su pieza artística Maxime Dethomas de 1896 muestra a un caballero espectador de un espectáculo de cabaret. Otro artista lo fue Paul Gauguin que experimentó la profundidad dándole valor al plano pictórico mediante colores planos y simbólicos, su obra Tres niñas bretonas bailando de1888 muestra como logra la profundidad por medio de los colores. Paul Cézanne se caracterizó por estructurar geométricamente sus composiciones a modo de sintetizar analíticamente la realidad, siendo el precursor del cubismo. Su obra El puente de Maincy de 1880 es un ejemplo. Van Gogh por su parte, se caracterizó por el dramatismo y exploración interna, pinceladas sinuosas, densas y coloridas, deformando la realidad para darle un toque onírico (relacionado a los sueños). El lienzo Los girasoles de 1888 son un excelente ejemplo del peculiar estilo del artista. Por último, destaca Joaquín Sorolla en España con sus composiciones de escenas populares y en donde se destaca la luz como se ve en Paseo por la playa, 1909.
Por último debe ser dicho que este movimiento que representó impresiones fugaces, su intención fue plasmar un instante, de ahí que muestre una relación con la fotografía porque ambos buscan captar el momento.
En nuestra próxima parada conoceremos el simbolismo y las obras que destacan el mismo. Los espero el próximo viernes.
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Para que sepas...
Junto con estas manifestaciones surgió en el ámbito de la pintura surge un nueva tendencia conocida como el japonismo o japonaiserie en el cual se incorpora la manera de componer de los japoneses a los cuadros y elementos de culturas asiáticas: japonesa y china. Ambos son productos de la apertura del comercio con China y Japón a mediados del siglo XIX, por ende, comienza a llegar obras y objetos (abanicos, atuendos, vasijas, etc.) Van Gogh en su obra Retrato de Pere Tanguy y Puente en la lluvia de 1887 muestra la influencia de la misma en su obra.